Crónica desplazamiento YF a Mallorca

Gran viaje el que nos hemos pegado por las Baleares dos colegas de la Youth Firm.
Teníamos comprado el billete hace tiempo, y pese al contratiempo de mis muletas fuimos allí a pasar el fin de semana con nuestras novias.

Salimos el viernes por la tarde, y nada más llegar nos fuimos para el hotel que teníamos reservado con plan de dejar las cosas y salir por ahí, pero hacía tela de frío y al final nos quedamos bebiéndonos un lote en el hotel. El hotelito lleno de guiris, alemanes, ingleses, etc...

Ya el sábado estuvimos todo el día dando una vuelta por la isla para verla un poco y salimos de noche por ahí a disfrutar un poco de la noche mallorquina, aunque sin enredarnos mucho que estábamos en plan pareja, y además el día siguiente quedaba una buena paliza de día.
No como otros, que eso les importaba bien poco y se fueron a la Tito's a beberse hasta el agua de los servicios. Fue imposible reunirnos con ellos de la resaca que tenían hasta el domingo.

Ya el día del partido nos levantamos y fuimos para la peña sevillista de Palma, donde ya habíamos estado la temportada anterior en el viaje que hicimos. Ya allí nos encontramos con varios miembros de la Vieja Guardia que como nosotros llevaban todo el fin de semana por allí haciendo el cafre.

Ningún problema con nadie de Mallorca, aunque "provocamos" un poco bebiéndonos un lote justo en la puerta de los ultras locales, y entramos al estadio a las 5 en punto. Colgamos una bandera de Biris y nos pusimos a animar con los chavales sevillistas que estaban por allí, algunos llegados desde Sevilla y algunos residentes en Mallorca.

Gran victoria del Sevilla por 2-3, y los jugadores como pocas veces hacen se quedaron a aplaudir a los desplazados (y agradecer a jimenez las dos entradas que nos dio), y vuelta para el hotel (7 tios en un coche, Vieja Guardia incluída jajaj).

Como siempre en estos viajes un millón de anécdotas que se quedan sin contar, aunque como detalle nos encontramos con Güiza en su cochazo acompañado por Nuria Bermúdez, que fue brutalmente insultada por los allí presentes. Mi parienta en plan hooligan que incluso perdió las gafas entre los gritos. 200 euros fue el precio que se pago por la gracia.

Por último dar las gracias al gitano y compañía por llevarme en carrito por el paseo marítimo de mallorca, me ahorrásteis un pateo.